El Universal
MADRID
14:03
Las naciones latinoamericanas, más que celebrar el Bicentenario, deberían conmemorar esa efeméride con una misa fúnebre, porque en 200 años murieron muchas esperanzas de libertad, progreso y justicia, afirmó el escritor español José Pérez Reverte. Al reunirse con periodistas latinos con motivo de la presentación de su libro El asedio, sostuvo que "todavía siguen sin estar vivas esas esperanzas".
En un hotel de esta ciudad, apuntó que en realidad lo que se está celebrando es la independencia de esas naciones de España, "que está muy bien, es lógico y justo, pero se está conmemorando que una clase poderosa, económica, que no ha soltado el poder en 200 años, accediera al poder".
Se refirió a los virreyes españoles y agregó que sólo hay que darse una vuelta "por cualquier barrio de México, por cualquier campo de Perú, por la pampa argentina y se verá que la miseria, el hambre y sobre todo la incultura siguen siendo las mismas.La independencia fue un gran fraude del que fueron víctimas las clases más desfavorecidas", subrayó. No obstante, el autor de La Reina del Sur, El capitán Alatriste y El pintor de batallas apuntó que con el paso del tiempo, tanto en América como en España, hay sociedades más justas, donde hay mecanismos democráticos y donde existe el mecanismo para progresar.
"Otra cosa es que lo usemos, pero es que ahora tenemos el mecanismo, antes no había manera, había una barrera, ahora al menos tenemos posibilidad de cambiar muchas cosas, infinitamente mejor que hace 200 años, y tenemos los cauces para salir adelante", dijo.
"Otra cosa es que seamos incultos, que seamos perezosos, torpes y que no queramos hacerlo o no podamos. Ahora tenemos la puerta abierta a la esperanza", subrayó. Rememoró que antes, quien nacía miserable sabía que moriría miserable y ahora no. "Puede que con estudios, con esfuerzo, con suerte, puede cambiar de condición, es algo más justo", agregó. Sobre su nuevo libro, El asedio, explicó que de entre las muchas tramas que tiene una de ellas apunta a América.
"En realidad se está intentando explicar cómo en ese momento se está jugando la ultra de América, como en ese momento se está jugando la suerte de Cádiz como ciudad puente o puerta de América y cómo en ese momento está empezando el final de una etapa, que es la etapa de la hegemonía de España en América", dijo. "Se está intentando explicar cómo ya Estados Unidos o Inglaterra empiezan a meterse ya, a fomentar esas independencias que terminarían en pocos años de desgajarse de lo que fue el antiguo imperio español", abundó.
Al referirse a su nueva novela, que transcurre en Cádiz, sur de España, de 1811 y 1812, en una ciudad sitiada por las tropas napoleónicas, Pérez Reverte explicó que la revolución liberal de Cádiz se hizo sin el pueblo. "Fue hecha por abogados, jóvenes, hijos que habían viajado, con cultura, por clérigos ilustrados, militares y aristócratas. Pero no es una Constitución hecha por el pueblo, el pueblo siempre estuvo lejos de eso", acotó.
"El pueblo fue el pretexto, el gran argumento que pusieron unos y otros para imponer sus tesis políticas. Y a América le pasó lo mismo, en América la independencia no fue del pueblo, y cuando dicen eso mienten como bellacos", enfatizó. Refirió que la Independencia fue de unas clases ilustradas, criollas, mestizas, españoles y criollos afincados allí.
"Decidieron con todo el derecho y legitimidad del mundo que ya estaba bien depender de los impuestos, de las normas, de las rigideces impuestas por un sistema económico anquilosado y anticuado que era el que se imponía en España", anotó.