10 de enero de 2010

Anthony Gormley / el británico expone en el Antiguo Colegio de San Ildefonso del Distrito Federal

El 31 de enero, el artista británico deja el Antiguo Colegio de San Ildefonso
Diario de Xalapa
10 de enero de 2010
Ricardo Rodríguez

Xalapa, Veracruz.- Con un continuo trabajo artístico centrado en el cuerpo humano, tomando papel como sujeto, objeto y lugar, el escultor británico Anthony Gormley ha mostrado su obra al público mexicano en mil 865 metros cuadrados del Antiguo Colegio de San Ildefonso, en el Distrito Federal.

Ocho salas y el Patio Principal del recinto fundado por los jesuitas en 1588, y que alguna vez fue una de las instituciones educativas más importantes de la Nueva España, son ocupados por obras que toman el cuerpo humano como punto de partida, explorando nuestra orientación en distintos espacios.

Las reacciones ante la desorientación, la relación del homo sapiens como animal y la arquitectura como construido, y nuestra fusión en los espacios imaginarios y emocionales de nuestros seres interiores y compañeros de vida, rondan el interés del autor, como el público puede constatar en las esculturas y los dibujos que se exhiben hasta el 31 de enero.

A finales de los 80, autoridades de la ciudad inglesa Gateshead, con gran tradición minera, le encargaron a Anthony Gormley una inmensa escultura en forma de ángel con más de 20 metros de altura, con la intención de dar la bienvenida a los viajeros entre Londres y Escocia. Esto se tradujo en un monumental símbolo de renacimiento urbano y del creador, que ha sido ganador del Premio Turner en 1994.

La exposición en San Ildefonso es una pequeña retrospectiva con proyectos realizados entre 1981 y 2008. Entre ellos, Learning to think (1991), una fusión de plomo, fibra de vidrio, aire y el espacio donde se instale. Esta pieza fue concebida originalmente para la Vieja Cárcel de Charleston, Estados Unidos, con cajas corporales huecas, el encierro de un vacío interior, que se conecta con el invisible e inaccesible vacío de arriba.

Otra obra que resalta es You, utilizada en la publicidad y programas de mano, pieza sobre la cual comenta el autor: "Estoy tratando de hacer la escultura desde el interior al usar mi cuerpo como el instrumento y el material. La forma proviene de la concentración. You originalmente debía erguirse en lo alto del teatro Roundhouse de Londres, que domina a toda la ciudad. La escultura nos recuerda a todos que somos humanos y que estamos incorporados, encarnados, que todo el sentido del yo y del ser nos llega por el cuerpo que sólo está pleno en sí, cuando se le coloca conectado a un mundo elemental".

Otras creaciones en la exposición son Bodies in space, Sublimate III, Grip II, Distillate III, Cotch IV, Insiders, Floor, Breathing Room, Ferment, Drift I, Touch, Reflection, Close I, Domains, Bread Walls, la monunental Firmament, 152 dibujos y fotografías.

Las instalaciones de Anthony Gormley son dramáticas y envolventes, tanto, que emiten emociones con facilidad. El autor no sólo piensa en la pieza, sino en las luces, las sombras y el tránsito del espectador por el espacio, adecuándolo a los efectos que desea transmitir. Concreto, acero, fierro vaciado, plomo y fibra de vidrio son algunos de los elementos de los cuales se echa mano Gormley para trabajar con lo representativo o lo abstracto, con lo real o lo imaginario y, principalmente, vacíos donde podría haber cuerpos. Todo esto provoca que el asistente deje sólo de espectar, que se mezcle con las presencias y ausencias, convirtiéndose en más que un espectador activo, en parte la instalación, del espacio. Lo anterior es definido por el creador como "el cuerpo colectivo y la relación entre uno y los otros a gran escala".

Gormely nació en Londres y tiene estudios en arqueología y antropología en Cambridge. Trabaja con esculturas que giran en entorno al concepto de límite, tanto del espacio como de los cuerpos, los escultóricos y del espectador.

Muchas de las piezas comienzan en su propio cuerpo, utilizado como elemento del que se extrae el molde que dará lugar a esas figuras humanas impersonalizadas que habitan sus instalaciones.

El proceso de construcción del molde es un juego de relaciones de acción-reacción, de ocupación-desocupación de un espacio que tiene como final la construcción de una figura antropomorfa -hombre, pero no individuo- que, en sí misma, no es más que un límite.

La exposición de Anthony Gormley que acoge el Antiguo Colegio de San Ildefonso reúne 26 piezas, más de 100 dibujos y litografías, además de instalaciones creadas en México en 2008: Bread Room y Firmament.

Esta última es icono de la exhibición, no sólo por su gran tamaño, sino porque encierra las inquietudes del artista. Es una enorme figura de un hombre, vacía y formada por piezas geométricas que se pueden admirar desde adentro, afuera y arriba de la instalación. Pero además, las 2.5 toneladas que la comprenden fueron trasladadas con grúa de un patio a otro del Antiguo Colegio ya que, según el autor, no se aprecia- ba ni tenía buena relación espacio-escultura-espectador.