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Diversificar sus espacios de presentación, atraer nuevos públicos hacia el bel canto y ofrecer espectáculos con una nueva visión, fueron los ejes rectores de la actividad desarrollada en 2009 por la Compañía Nacional de Ópera (CNO), del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA).
De esa forma, en los últimos 12 meses Opera de Bellas Artes llevó a cabo un total de 15 espectáculos, de los cuales siete fueron puestas en escena, cinco con producciones nuevas, además de una serie de cinco conciertos para un total de 30 mil espectadores. Estos se llevaron a cabo en esta ciudad y en Puebla, León y Guanajuato, en una tarea del INBA por llevar el arte del canto hacia el interior del país, con una excelente respuesta por parte del público.
Por ello, 2009 se presentó como un año de grandes logros y satisfacciones, ya que sus actividades permitieron consolidar su presencia como primera y única casa de ópera de México con alcances internacionales, ya que dio forma a sus elencos con los más destacados artistas extranjeros, sin dejar de ser un espacio de expresión al gran talento vocal mexicano.
Por primera vez en muchos años, la Ópera de Bellas Artes tuvo como recintos la explanada y vestíbulo del Palacio de Bellas Artes, el histórico Teatro de la Ciudad `Esperanza Iris`, el Teatro Hidalgo del IMSS, el Teatro Julio Castillo del Centro Cultural del Bosque, la Antigua Basílica de Guadalupe y la Sala Nezahualcóyotl del Centro Cultural Universitario. Así como el Auditorio de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, el Fórum Cultural de la ciudad de León y los teatros Juárez y Principal en Guanajuato.
Cerca de dos mil personas acudieron al concierto operístico realizado el 1 de febrero en la explanada del Palacio de Bellas Artes y dio paso a la primera puesta en escena `Don Giovanni`, de Mozart, en el Teatro de la Ciudad, dirigida por Mauricio García Lozano y dirección concertadora del británico Philip Pickett, fundador del New London Consort y del ensamble shakespeareano Globe de Londres.
En marzo se llevó a cabo el segundo concierto operístico con la obra Réquiem, de Mozart, bajo la dirección huésped de José Luis Eleazar, en la explanada del Palacio de Bellas Artes, donde se congregaron nuevamente mil 800 personas. En el marco del Festival de México en el Centro Histórico se escenificó la obra Rigoletto, de Verdi, una de las piezas emblemáticas en la historia de la ópera que contó con la participación de destacadas figuras del canto mexicano.
Durante junio, la CNO ofreció oberturas y fragmentos de óperas de Gioachino Rossini, Gaetano Donizetti, Giuseppe Verdi, Charles Gounod y Piotr Ilich Tchaikovsky, dirigido por el maestro Alfredo Ibarra, en su calidad de director huésped de la Orquesta y el Coro del Teatro de Bellas Artes. A finales del mismo mes, se presentó en concierto Alexander Nevsky, de Serguei Prokofiev, en el Teatro Hidalgo, en colaboración con la Orquesta Sinfónica Nacional.
A principios de julio se presentó la nueva producción operística Muerte en Venecia, de Benjamin Britten, bajo la dirección musical de Christopher Franklin y escénica de Jorge Ballina, en el Teatro Julio Castillo del Centro Cultural del Bosque. Esta fue la primera vez que la obra se presentó en México y América Latina.
En agosto, la compañía, a través del Coro del Teatro de Bellas Artes (OTBA), tuvo a su cargo Réquiem, de Mozart, concierto con el que se celebró el Año Jubilar de la Basílica de Guadalupe, al cumplir 300 años de estar dedicado a la veneración de la Virgen de América.
Esta magna celebración se llevó a cabo en la Antigua Basílica de Guadalupe bajo la dirección del maestro huésped Alfredo Ibarra y la participación de los solistas Marcela Chacón (soprano), María de Lourdes Beltrán (mezzosoprano), Ramón Yamil León (tenor), Martín Luna (barítono) y Abraham Alvarado en el órgano. En su versión concertante, en septiembre y octubre la obra La condenación de Fausto, de Héctor Berlioz, dio continuidad a la temporada 2009 en la Sala Nezahualcóyotl del Centro Cultural Universitario.
El montaje contó con el tenor mexicano Ramón Vargas, uno de los cantantes líricos más prestigiados de la escena internacional, quien interpretó a `Fausto` y estuvo acompañado de la mezzosoprano albanesa Enkelejda Shkoza y del barítono Rubén Amorretti, interpretando una obra que no se había presentado desde hacía 24 años.
En el marco del Festival Internacional Cervantino, la Compañía Nacional de Opera presentó la obra Carmina Burana en las ciudades de León y Guanajuato, además del concierto operístico Gala Luna. Se trata de un espectáculo escénico-operístico-musical que tomó como base la ópera buffa El mundo de la Luna, de Franz Joseph Haydn, parte de cuya acción tiene lugar en un falso satélite que existe sólo y, de manera peculiar, en la imaginación de los protagonistas.
En esta gala de ópera lunar, la trama original de la obra de Haydn fue extrapolada al ambiente cultural y social de 1969, en el momento de la llegada del hombre a la luna. La continuidad musical del espectáculo estuvo armada con una veintena de piezas operísticas que van desde Mozart hasta Strauss, pasando por Verdi y Puccini, Wagner y Bizet, Gounod y Offenbach, Saint-Saëns y Tchaikovski, entre otros.
Luego de otro concierto operístico en el mes de noviembre, las actividades cerraron con la puesta en escena de dos obras veristas italianas: Cavalleria rusticana y Pagliacci, apostando por la dirección concertadora del italiano Marco Zambelli y César Piña como responsable de la dirección escénica y del vestuario. El elenco estuvo formado por destacados artistas mexicanos, como un ejemplo de talento en Cavalleria rusticana: Violeta Dávalos, Alfredo Portilla, Carlos Almaguer, Carla López-Speziale y Eva María Santana.ç
Mientras que en Pagliacci tomaron parte José Luis Duval, Enivia Mendoza, Carlos Almaguer, Gerardo Reynoso y Ricardo López, un elenco totalmente mexicano, acompañados por el Coro y la Orquesta del Teatro de Bellas Artes y el infantil Schola Cantorum de México.
Cabe destacar que Ópera de Bellas Artes continuó su apoyo a los nuevos valores del bel canto mexicano con la organización de dos importantes certámenes de canto: el XXVII Concurso Nacional de Canto Carlo Morelli y la ronda preliminar de eliminatoria en México del Certamen Internacional de Canto Neue Stimmen. En el primero, el tenor Gerardo Enrique Reynoso Hernández obtuvo el primer premio, el segundo lugar lo consiguió el también tenor Rubén Mora Villegas, mientras el tercero fue para el barítono Armando Piña López.
Otros ganadores fueron Mariana Valdés Saucedo como "Revelación Juvenil", Elisa Avalos Martínez con el premio "Gilda Morelli" y "Pro Opera"; mientras que Mariana Valdés Saucedo y Armando Piña López obtuvieron Becas INBA. El jurado estuvo integrado por Susan Young, preparadora vocal (Estados Unidos); Xavier Ribes, director de coros (España); Ramón Shade, director de orquesta; Gustavo Rivero Weber, director general de Música de la UNAM, y Alonso Escalante, director de Ópera de Bellas Artes.