Organización Editorial Mexicana
6 de noviembre de 2010
EN EL 150 ANIVERSARIO DE SU NATALICIO
El Sol de México
Ciudad de México.- Imágenes que recrean pequeños fragmentos, ideas, emociones y sensaciones del universo de Chéjov, más que su visión estructural o su dramaturgia, conforman "Donka", espectáculo que presentará Teatro Sunil, bajo la dirección del artista suizo Daniele Finzi Pasca en el marco de la edición 38 del Festival Internacional Cervantino.
Finzi Pasca recordó en conferencia de prensa que la idea de crear una obra en torno al escritor ruso nació del director del Festival Chéjov de Moscú, Valery Shadrin, "quien anunció que para conmemorar los 150 años del natalicio del escritor, pondría en manos de directores extranjeros, cuatro producciones. Y para mi sorpresa, yo fui uno de los elegidos".
Así, en compañía de la compositora, bailarina y coreógrafa María Bonzanigo inició un viaje por el mundo chejoviano y encontró su presencia en varios sitios: "Cuando el autor del Tío Vania nace, un barón ruso construye en Lugano (lugar donde nací), un castillo que contaba con su propia sala de conciertos. En ese espacio construyeron años después la escuela donde estudié y, sin lugar a dudas, las piezas y las notas de la orquesta permanecieron ahí. Algunos de esos elementos los integré en esta puesta en escena".
Otro elemento que maneja la compañía gira en torno a la fascinación de Antón Chéjov por la anatomía, "su manera precisa de describir la realidad humana y la forma trágica de retratar la vida, se podrá apreciar en objetos suspendidos en una trágica fragilidad, en los personajes que parecen derretirse lentamente como si fueran hielo expuesto al sol..., como cera al fuego".
Así, agregó el director de Teatro Sunil, sin ser especialistas en el dramaturgo checo, -gran amante de los cementerios y los espectáculos de circo-, los ocho miembros de la compañía ofrecen su visión particular de la vida del autor de "El jardín de los cerezos", considerado un clásico en la dramaturgia mundial.
Para la compañía suiza existen dos formas de crear y recrear los espectáculos, "hay quien camina y quien escala. Nosotros preferimos caminar, interactuar con el público y sentir su resonancia, de realizar un teatro empático, es decir, un teatro de la caricia".
Daniele, quien llama cómplices a su equipo de trabajo -son creadores con quienes ha trabajado por muchos años, además de compartir no sólo el mismo sentido de estética y concepto de teatro, sino también la pasión por defender su mundo imaginario-, finalmente explicó que 'donka' es una palabra rusa que nombra la pequeña campana que se ata al extremo de una caña de pescar y suena cuando un pez ha mordido, "nosotros manejamos esa imagen para reflexionar sobre la meditación, cuando al parecer no se está haciendo nada, cuando en realidad se está en la espera de que suene la campana de la inspiración".
En una gira por Canadá, Finzi Pasca conoce el Cirque Eloize, cuyos directivos lo invitan a escribir y dirigir un espectáculo. De esa manera surge en 2002 'Nomade' -"La nuit, le ciel est plus grand", creación que obtiene reconocimiento internacional; un año después aterriza el proyecto denominado 'Rain' -"Comme une pluie dans tes yeux"-. Estos espectáculos han sido montados en escenarios de Nueva York, San Francisco, París, Londres, Hong Kong, Viena, Roma, Madrid y Milán, entre otros. En 1991 estrenó el espectáculo "Ícaro", que continúa presentándose en seis lenguas diferentes.
"Rain" gana el premio Best Touring Production of the Year Theatre Award en Inglaterra y Daniele Finzi Pasca fue nominado al "Drama Desk Award" como uno de los cinco mejores directores de Broadway.
El Cirque du Soleil le encargó la creación y la dirección de un nuevo espectáculo y en 2005 presenta en Montreal la obra "Corteo", vista en Estados Unidos por más de tres millones de espectadores. En 2006 escribió y dirigió la ceremonia de cierre de las Olimpiadas de Turín, visto en televisión por millones de personas.
En 2007 obtiene el Swiss Award y ese mismo año escribe y dirige "Nebbia" (Cirque Eloize en coproducción con el Teatro Sunil) obteniendo reconocimiento internacional. En 2008 le otorgan el Premio Suizo de la Escena y recibe la nominación al Premio Europa para las Nuevas Realidades Teatrales. En 2009 dirige la ópera "L'amour de loin" para la Ópera Nacional Inglesa, en coproducción con la Ópera de Anversa y el Metropolitan Ópera House de Nueva York.
* HÉCTOR INFANZÓN: "LA GEOMETRÍA MUSICAL DE LA CIUDAD DE MÉXICO"
En un concierto que tuvo como pretexto los sabores, aromas, paisajes y sonidos de la Ciudad de México, Héctor Infanzón deleitó al público ayer por la tarde en la exHacienda de San Gabriel de Barrera con su inmenso poder ecléctico que lo ha colocado como uno de los compositores y ejecutantes más sobresalientes de nuestro país.
Fueron ocho piezas las que el conjunto seleccionó para el programa pero más allá de la cantidad, lo que agradeció el público fue la entrega y por supuesto la calidad de los músicos. Melodías como "El vago", "Como en feria", "Aquí en mí" y "Nos la debíamos" reflejaron las profundas raíces que tiene el pianista Infanzón con la capital del país.
Lugares emblemáticos del centro no sólo tuvieron rostro musical sino también la agilidad y virtuosismo de sus integrantes: Giovanni Figueroa, en la batería; Luis Gómez, percusiones, y Adrián Infanzón, en el bajo.
"Hematofonía para cuatro cuerpos" fue la ejecución que más sorprendió a los asistentes donde los integrantes se colocaron sobre una tarima y generaron todo tipo de sonidos con su cuerpo. Prácticamente todo el cuerpo era motivo para ser golpeado con las palmas de las manos y generar ritmos que se combinaban con el violento zapatear, en una melodía que el propio Héctor Infanzón definió como "concierto para moretones". La audiencia reconoció a través de sus aplausos el ejercicio cuerpo-musical de los integrantes.
Otra de las sorpresas estuvo en la pieza "Rincón brujo", canción que en un principio fue pensada exclusivamente para piano pero que ha evolucionado a otras versiones.
En esta interpretación tomó parte la bailarina Lupita Padilla, quien acompañó con su sensual y vertiginoso movimiento las notas del piano para darle un toque muy especial.
Con esta gama sonora y visual, el público que se dio cita en la exHacienda de San Gabriel Barrera disfrutó de un concierto extraordinario, donde el talento y el compromiso fue la columna vertebral para una tarde jazzística con toques urbanos y sonidos exquisitos.
